Turin 'Amo del Destino'
Muchas veces parece que las cosas vienen dadas como si estuvieran predeterminadas, a veces parece que por mas que luchas y haces todo lo posible, nada sale bien... pero aún así siempre hay esperanza y siempre hay formas de salir adelante, de llegar al final por mucho que cueste, y únicamente es cuestión de saber ser y vivir libre, libre para que puedas así tú mismo decidir que destino forjarte.
La maldición de la casa de Húrin
		Húrin era un gran guerrero vasallo de Fingon, rey de los noldor. En la batalla en la que el rey murió, muchas otras desgracias ocurrieron. Huor hermano de Húrin murió, y Húrin fue capturado. Morgoth, el Enemigo Oscuro, lo interrogó para conocer donde tenían los elfos y los hombres sus ciudades escondidas y sus fortalezas, mas Húrin nunca dijo o reveló nada para traicionar a sus amigos y menos a su casa ni su familia. Entonces Morgoth, enojado, lo maldijo a el y toda su descendencia, encadenándolo en una silla de piedra sobre las torres más altas de Angband, desde donde podía verse toda Beleriand: -Siéntate ahora ahí y mira las tierras donde el mal y la desesperación llegarán sobre los que tu más amas. ¡Te has atrevido a desafiar el poder de Melkor, dueño de todos los destinos de Arda! ¡Por tanto con mis ojos verás y con mis oídos escucharás y nunca más te moverás de aquí hasta que todo llegué a su amargo fin! Pero a pesar de todo, Húrin nunca habló ni tembló ni pidió misericordia...
Morwen, esposa de Húrin vivía en Hithlum con su hijo Túrin de ocho años. Cuando Húrin tuvo que partir de nuevo a la guerra ella estaba de nuevo embarazada. Hithlum se perdió y fue dada por Morgoth a los hombres cetrinos, los cuales devastaron el lugar y esclavizaron a hombres y elfos que aún se atrevían a vivir ahí. Sin embargo a Morwen, la dama de Dor-lómin, le temían y la tenían por bruja y hechicera, por lo que a ella no la tocaron. Pero Morwen temía que a Túrin lo apresaran y esclavizaran, así que lo envió a Doriath con Thingol, ya que Morwen era hija de Baragund, sobrino de Barahir, padre de Beren y además el rey era amigo de Húrin. -Es otoño hijo, y tu papá no regresa... - Morwen no quería decirle a Túrin de los rumores de que Húrin, aunque vivo, estaba preso, pero seguramente él ya había oído hablar de ellos - ¿Te gustaría ir a vivir por un tiempo al bosque, con los amigos de tu papá? -¿Tu vendrás mamá? -No hijo, yo estoy embarazada y en poco tiempo tendrás un hermanito, por ahora ve con quienes te envíe y después yo iré con tu hermanito que nazca. - Sin embargo, Morwen no quería dejar ese lugar, donde había vivido con Húrin. -¿Y mi papá vendrá? -No lo se hijo, no lo se... Túrin se fue a vivir desde pequeño a Doriath y ese mismo año Morwen dio a luz a una niña, a la que llamó Nienor, es decir, 'Llanto'. Cuando Túrin llegó a Doriath fue bien recibido por el rey Thingol, quien lo tomó como su hijo adoptivo y lo cuidó y educó. También mandó mensajeros a Morwen a Dor-lómin para que se fuera a vivir con ellos, pero ella no quiso dejar el lugar, aunque envió con los mensajeros un regalo para su hijo: el casco-Dragón de Dor-lómin, símbolo de herencia de la casa de Hador.
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